Ayer se presentó en Madrid, en el salón de actos de la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información el denominado “Libro Blanco para el Diseño de las Titulaciones Universitarias en el marco de la de la Economía Digital”.
El Libro Blanco realiza un análisis comparativo entre oferta y demanda formativa y servirá de guía para que las universidades públicas y privadas generen titulaciones con mayor salida profesional para sus egresados.
La iniciativa es fruto de la colaboración de varios ministerios, habiendo estado el presidido por el Secretario de Estado de Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información (SETSI), Víctor Calvo-Sotelo; la Secretaria de Estado de Investigación, Desarrollo e Innovación, Carmen Vela; el Secretario de Estado de Educación, Marcial Marín; y el Secretario de Estado de Empleo, Juan Pablo Riesgo.
Tras la presentación, el Presidente del CCII y del COIICV, Juan Pablo Peñarrubia, asistente al acto y participante como experto en el grupo de tecnología de la innovación, ha señalado en primer lugar la importancia y el acierto de incorporar la visión multidisciplinar de los expertos integrantes de los grupos de trabajo, del mundo de la empresa y la universidad, de los profesionales y la academia. Por otro lado, y en relación al Libro Blanco en sí, la importancia de aportar a las universidades y los empleadores un documento actualizado sobre la demanda y oferta de perfiles especializados en el ámbito de las tecnologías de la información, y en el ámbito más amplio que se ha dado en llamar de la economía digital. Finalmente ha destacado la importancia de dotar de un documento de referencia para el aprovechamiento desde las universidades, evitando partir del folio en blanco. Ha subrayado en particular la utilidad del ejercicio de haber generado una especificación competencias asociadas a nuevos perfiles demandados por las empresas, lo cual facilitará a las universidades la labor de diseño y puesta en marcha de nuevas titulaciones. Todo ello teniendo en cuenta que la participación y coordinación de la ANECA ha propiciado un documento que sigue sus criterios y puede ser por tanto de gran utilidad y productividad para las universidades.
Por ultimo, el Presidente de CCII ha destacado que el Libro Blanco presentado es solo una cara de la moneda, ya que es notoria la necesidad de actualizar igualmente los perfiles tradicionales del conjunto de las ingenierías de modo que sigan aportando el centro de gravedad de sus respectivos ámbitos profesionales y de conocimiento, pero flexibilizando, a la vez, la creación de titulaciones complementarias que sean demandadas por la sociedad e incrementen la competitividad de nuestra economía.
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