Las universidades públicas valencianas generan el 1,9% del PIB y un 2,3% de la Comunitat Valenciana
El cuarto informe elaborado por el Instituto Valencia de Investigaciones Económicas (Ivie) sobre La contribución socioeconómica de la Universidades Públicas valencianas ha puesto en valor el papel que desempeñan las universidades públicas de la Comunitat Valenciana en la economía valenciana y ha resaltado la importancia que tiene tanto en estudios como en producción científica y patentes.
El Sistema de Universidades Valencianas Públicas (SUVP) y su actividad asociada generan más de 2.090 millones de euros de renta en la Comunitat Valenciana, lo que supone el 1,9% del PIB. Del mismo modo, contribuyen a la creación de más de 44.202 puestos de trabajo, es decir el 2,3% del empleo valenciano.
Según el estudio, las universidades públicas permiten devolver a la sociedad a través de la recaudación fiscal generada por los titulados, 2,7 euros por cada euro que las administraciones invierten en su funcionamiento.
Además de la importante contribución económica, las 5 universidades públicas valencianas -Universitat de Valencia, Universitat Politècnica de Valencia, Universitat Jaume I, Universidad de Alicante, Universidad Miguel Hernández - también recogen a la mayoría de estudiantes de grado y de máster, el 85% y el 68% respectivamente, así como el 96% de la producción científica y el 100% de las patentes nacionales obtenidas en la región.
Es importante destacar también como el informe recoge cómo la educación universitaria ejerce un importante efecto modulador de las desigualdades entre hombres y mujeres, aunque no las elimina. Se constata entre los universitarios una opción más favorable a la igualdad de género y se observa un mayor equilibrio entre hombres y mujeres tituladas, aunque estando lejos de la paridad como ya hemos comentado en otras ocasiones desde COIICV, especialmente en las carreras STEM (science, technology, engineering and maths).
Pese a todo y entre los grandes retos de las universidades, además de un sistema de financiación estable que se base en la eficacia y eficiencia de los recursos, figura cómo éstas van a afrontar la adaptación de los estudios a las necesidades de las empresas y cómo va a dotar a los alumnos de esas nuevas competencias digitales para cubrir esas necesidades, además del propio proceso de transformación y digitalización de la propia universidad.